Marketing estratégico

Los objetivos empresariales deben estar enmarcados en un plan que sirva de guía para cada una de las acciones y decisiones que se tomen. Cuando se trata de promocionar la marca o producto, de conquistar el mercado, es necesario saber que cada cosa tiene su tiempo.

La planificación de las estrategias de marketing establece lapsos de ejecución y, por consiguiente, los resultados y beneficios se verán a medida que estos se desarrollen; unos en corto tiempo (operatividad), mientras que otros a mediano o largo plazo (estratégico).

El marketing puede desarrollarse de dos maneras distintas pero complementarias a la vez: de forma Operativa y de forma estratégica, ambas garantizan el éxito del negocio. Veamos a continuación lo referente al marketing estratégico.

Qué es marketing estratégico    

Empezamos por señalar que una “estrategia, es una serie de acciones muy meditadas, encaminadas hacia un fin determinado”.

De manera que, el marketing estratégico es una disciplina metodológica enfocada al mediano y largo plazo, orientada al análisis del mercado, con la finalidad de encontrar oportunidades que favorezcan el crecimiento de la empresa y poseer mejores ventajas competitivas que la hagan sobresalir frente a los consumidores, satisfaciendo sus necesidades de manera óptima y eficiente    

Las personas tienen necesidades que necesitan ser satisfechas, es ahí, cuando interviene el análisis del mercado para determinar cuáles son esos bienes y servicios que deben producirse. Los nuevos patrones de emprendimiento empresarial parten de esta premisa que no siempre fue así; la visión de crear un determinado producto para luego venderlo, ya no funciona. 

De manera que, el marketing estratégico tiene como principal objetivo detectar esas necesidades que buscan satisfacerse, lo que traerá por consiguiente maravillosas oportunidades económicas para construir y mantener una empresa rentable.

Por lo tanto, quienes se desempeñan laboralmente en el marketing empresarial, necesariamente deben considerar la parte estratégica y observar constantemente el comportamiento de los mercados para descubrir o determinar qué nuevo camino tomar; con cuáles productos renovar la imagen corporativa; saber en qué anda la competencia; en fin, idear los mecanismos que le permitan a la empresa mantenerse sostenidamente en el tiempo.

Características y ejemplos

Encontrar oportunidades es la base del marketing estratégico. Para lograrlo, el analista o asesor debe anticiparse a los acontecimientos del mercado y así, ganar terreno con los consumidores y ofrecerles aquello que necesitan.  

En este sentido, cualquier estrategia de mercadeo debe elaborarse considerando los siguientes aspectos básicos:

1.- El cliente es lo primordial:

Cuando se tiene claro quiénes son los clientes y qué es lo que buscan, se ha dado el primer paso que garantiza la rentabilidad de la empresa.

El público en general no necesita campañas atorrantes, mucho menos engañosas.  La gente busca innovación, ofertas que realmente atraigan, pero sobre todo busca atención.

Si una empresa invierte en atención al cliente dentro sus estrategias de marketing, las opiniones serán positivas y se logrará fidelizar clientes.

2.- Conocer la estructura conceptual de la empresa

La estructura conceptual y de valores que sostiene a una empresa, es tan importante como su estructura económica y financiera.

Es por ello que la visión y misión, determinan hasta dónde quieren llegar, qué pretenden lograr, cuán grande son sus sueños empresariales.

Visiones y misiones reducidas, sin optimismo, sin pasión por lo que se hace, sin actitud de logro, indudablemente generará resultados limitados, si es que los genera.   

Los negocios tanto de estructura física como virtuales, deben plantearse objetivos ambiciosos.

La tienda digital Amazon, es un claro ejemplo. No se ha conformado con vender productos y servicios, ha ido más allá, adaptándose, innovando y acertando con verdadera inteligencia digital y logística; ocupando el sitial de honor en relación con su competencia.   

 

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3.- Comportamiento del mercado y la competencia

Conocer el entorno es clave si se pretende poner en marcha un negocio. Todo aquello que pueda influir negativa o positivamente en el logro de los objetivos empresariales debe tomarse en cuenta, más aun, sabiendo que no estamos solos en el mercado.

Por ejemplo, la estabilidad política del país donde funciona o pretendes establecer tu empresa; las contracciones económicas pueden ser a la vez, un gran riesgo o, una gran oportunidad, todo depende del enfoque; los avances tecnológicos y su aporte al desarrollo de nuevos negocios; la valoración de la conservación del medio ambiente, entre otras.

Tener claro el panorama desde diferentes puntos de vista, permitirá a la vez, que puedas conocer a tu competencia y tu posición frente a ella. Entrar en una batalla con todas las de perder, no es nada racional ni coherente.

Apple, es un claro ejemplo que indica que una empresa no se puede estancar así este en la cima de la montaña. Si Steven Jobs, se hubiera conformado con el primer modelo de computador que sacó al mercado, la competencia lo hubiera superado y sepultado.

4.- Posicionamiento e imagen de la marca

Saber cuál es la percepción que tiene la gente de tu marca y sus productos, es primordial para ubicarnos en tiempo y espacio y, seguir avanzando.

Marcar la diferencia en el mercado es lo que gana mayor clientela. Puede que una marca sea muy famosa, pero si un producto de esa marca no logra llenar o superar las expectativas del público, no funcionará ninguna estrategia de mercadeo

5.- Competir con buenas estrategias

Todo negocio debe considerar posicionar los siguientes tres elementos básicos en su plan estratégico:

  • Que sus precios sean los más competitivos 
  • Que existan uno o varios elementos que te diferencien de la competencia
  • El enfoque en un público concreto

Quienes aplican mejores estrategias, son los que se llevan la gloria.

Ofrece algo distinto; mejora lo que ya existe; aprovecha la oportunidad que te brinda los escasez de un producto.

La marca Red Bull, logró conquistar el mercado con el lanzamiento de un nuevo producto y, además, creó una nueva categoría como lo fue las bebidas energizantes. La innovación fue la clave de su éxito; el producto era atractivo y no tenía competencia.

Cuándo aplicar el marketing estratégico

Recordemos que, al hablar de lo estratégico, nos referimos a conseguir nuestros objetivos a mediano o largo plazo.

Si tu empresa, por cuestiones financieras necesita resultados inmediatos que impulsen la rentabilidad a corto plazo, el marketing operativo es la opción más viable.  

Los pequeños y medianos negocios ya consolidados o, cualquier iniciativa de emprendimiento empresarial, necesariamente deben estudiar muy bien el mercado en el que están o estarán inmersos, dado que ello, favorece las decisiones que se tomen en relación con los precios, a la calidad del producto y de qué manera se promocionará.  

Si una empresa, sea cual sea su connotación, grande, mediana o pequeña, desea desarrollar una idea, lo primero que debe considerar es la viabilidad desde todo punto de vista y la factibilidad de vender el producto cuando lo lance al mercado. 

Una vez que analizas todas las variables, resulta que tienes en la mano una gran oportunidad y serás capaz de sobresalir y generar un gran impacto en el público, no pierdas más tiempo y desarrolla tu idea.