Especialización e hiperespecialización laboral
En la sociedad actual, la generalización para trabajar en una estructura ha quedado insuficiente ante los elevados niveles de competitividad existente en los diversos sectores, dando paso a la necesidad de especializarse en tareas específicas que amplíen las posibilidades, es así la especialización en hiperespecialización
¿Qué es la especialización?
Dentro de un proceso productivo, el término corresponde a la asignación de las diferentes tareas y sus actividades derivadas, a distintos individuos o grupos de trabajo en función de las características, recursos, conocimientos y/o habilidades que posean.
La especialización, se ha convertido en un concepto ampliamente utilizado por la dirección estratégica de empresas a fin de incrementar la productividad, debido a que parte de estrategias basadas en organigramas donde cada tarea es asignada a un especialista.
Origen de la especialización del trabajo
Si bien el concepto se acentúa con la llegada de la industrialización y creación de modelos productivos, podría decirse que su aparición data de la aparición de las labores artesanales donde se evidenciaron las primeras divisiones de trabajo gracias a la aparición de profesionales más habilidosos que maximizan el ahorro de recursos e incrementar los niveles de eficiencia.
Más tarde, sería Frederick W. Taylor quien se encargará de darle mayor impulso a la especialización a través de la creación del taylorismo, sistema de organización racional del trabajo que pretendía alcanzar mayores niveles de utilidad partiendo del reparto de etapas de producción. A esta misma línea de pensamiento se suma David Ricardo, quien llevará el pensamiento hasta la producción de bienes.
Considerando que la especialización parte de la idea de tareas estratégicamente asignadas a personas con conocimiento en determinado proceso productivo, no es de extrañar que el concepto logre expandirse anudado al crecimiento de las industrias de producción en masa y la maximización de economías de escala.
Características de la especialización
El primer aspecto que define a la especialización es hecho de ser el antónimo de la generalización del trabajo dentro de cualquier estructura, pues rompe el esquema de empleados que pueden cumplir distintas actividades dentro de su campo laboral; en otras palabras, se caracteriza por:
- Tareas específicas a ejecutar por una persona especialista en el tema.
- Presume la existencia de profesionales con capacidades o conocimientos concretos, indistintamente que se deriven de su experiencia o preparación.
- Cada persona desempeña un rol preciso que no puede ser asumido por otro.
- Disminuye las probabilidades de error.
- Hace más simples los procesos productivos.
- Brinda acceso a salarios más altos y complica el reemplazo.
En resumidas cuentas, dentro de cualquier empresa la especialización persigue el incremento de los niveles de eficiencia, al tiempo que disminuye los costes y evita la pérdida de tiempo que supone cambiar de tarea o de maquinaria; del mismo modo, elimina la necesidad de desplazamientos del personal de una instalación a otra, y el aprendizaje de otros procesos.
Pros y contras de la especialización
Para el profesional especializado, se traduce a la posibilidad de destacarse, aspirar a mejores salidas laborales y disminuir la competencia, pues sobresaldrá del montón sin mayor esfuerzo; asimismo minimiza el riesgo de ser reemplazado y tendrá acceso a salarios más elevados.
En el ámbito de la empresa, la contratación de un especialista – o en su defecto, formar para la realización de un determinado proceso – se traduce a la ventaja de agilizar el cumplimiento de los compromisos, sobre todo, en sectores técnicos.
En contraposición, mientras mayor sea el grado de especialización, más le costará a la empresa encontrar un trabajador que cumpla con las capacidades en el supuesto de necesitar sustituir,
Ejemplos de la especialización del trabajo
La especialización puede darse en dos contextos, a nivel personal, o de carácter conjunto; dentro del primero está por ejemplo, la empresa que busca empleados expertos en tareas muy específicas, como el manejo de recursos tecnológicos complejos o una constructora que necesite un trabajador especialista en el uso de una determinada herramienta.
Desde la perspectiva del carácter conjunto, se toma como ejemplo a la empresa que decide dedicarse de lleno a una actividad específica o asume el concepto en un sector determinado desarrollado su negocio en función de ello; para muestra empresas que se dedican exclusivamente al desarrollo de productos Apple.
¿Qué es la hiperespecialización?
A modo groso, este concepto puede verse como la evolución de la especialización, pues se trata de profesionales que se especializan en nichos de conocimiento más pequeños y concretos dentro de su propio sector.
En la actualidad, más que una moda, la hiperespecialización se ha convertido en un verdadero fenómeno imperativo para los profesionales, especialmente aquellos que buscan abrirse camino en el sector digital y tecnológico.
Origen del concepto
Entre otras cosas, el nivel de competitividad que actualmente vive el mercado laboral, ha conllevado al surgimiento de puestos de trabajo cada vez más deslocalizados, obligando al profesional a centrar su atención en subgrupos o micronichos que se torna más y más pequeños.
Es así como van dejando aparte el resto de áreas vinculadas a su profesión, dedicándose a encontrar aptitudes, conocimientos o destrezas que le permitan cubrir necesidades mucho más específicas y resolver problemas. Lo que les permite destacarse frente a otros candidatos e incrementar las probabilidades de ocupar puestos privilegiados.
Puntos a favor de la hiperespecialización
Considerando los factores antes expuestos, no cabe duda que la hiperespecialización solo supone ventajas, las más destacadas se enumeran a continuación:
Incremento de la visibilidad en el mercado laboral
A diferencia de un profesional con formación genérica, uno hiperespecializado causará mejor impacto ante cualquier reclutador, ya que supondrá no solo ideas más centradas, sino mayor nivel de iniciativa.
Mayor productividad
Indistintamente que se trate de tareas encomendadas por jefes o clientes – en el particular de trabajar por cuenta propia – con la hiperespecialización los resultados serán satisfactorios siempre, pues existirá mejor nivel de eficiencia durante todo el proceso, a fin de cuentas, el profesional estará formado para ese tipo de tarea.
Estar en la mente del usuario
Tal como sucede con las marcas, los profesionales hiper especializados se quedan en la mente del cliente o usuario; para muestra, se toma el ejemplo del profesional que repara móviles usados, tarea que pueden desempeñar cientos de personas muy bien.
Al especializarse en un nicho más pequeño las probabilidades de resaltar se hacen mayores, en este caso, reparando iPhone por así suponerlo, pero se harán todavía más grandes, si el profesional se hiperespecializada en reparar procesadores de un modelo en específico.
De ello se entiende, que la hiperespecialización en la resolución de un problema en específico o la oferta de un determinado servicio, hará que cualquier empresa de tecnología o clientes particulares, busquen como primera opción a este profesional, y no a uno con aptitudes más generalistas.