Bienes inmuebles
La definición de bienes dentro de la economía, se presta para una amplia consideración de aspectos y parámetros, surgiendo una amplia clasificación en función del objetivo que persiguen; es así como nacen por ejemplo, los bienes inmuebles, aquellos que debido a su naturaleza, no pueden transportarse de un lugar a otro sin comprometer su integridad y/o funcionamiento.
¿Qué son exactamente los bienes inmuebles?
Comúnmente denominados bienes raíces, el término bien inmueble hace referencia a todos aquellos basados en propiedades inmóviles, ya que debido a sus características, movilizarnos supondría su destrucción
En palabras más simples son los bienes que dada su naturaleza, no pueden ser trasladados de su lugar de origen sin que implique su destrucción – como es el caso de casas, edificios, parcelas o posesiones de tierra que formen parte del suelo terrestre – o limiten su funcionamiento, para muestra algunas maquinarias.
Características que definen a los bienes inmuebles:
De la definición anterior no es demasiado complejo deducir que la principal características de los bienes inmuebles es el hecho de permanecer sujetos al suelo, por lo que se consideran:
- Bienes incapaces de ser transportados a una ubicación distinta a la de origen.
- No pueden catalogarse como cosas, al menos no desde el punto de vista jurídico.
- Tienen gran valor, sobre todo si se comparan con otros tipos de bienes.
- Requieren de un registro de propiedad, o en su defecto, algún documento jurídico o formal que acredite como propietario.
- Son por tendencia, la clase de bienes que requieren garantías hipotecarias.
Tipos de bienes inmuebles
De la misma forma que sucede con los bienes muebles, los de tipo inmueble se subdividen en otras clases dependiendo de sus propias características; esta clasificación arroja:
1.- Bienes inmuebles por naturaleza:
El primer tipo de bien inmueble tiene la particularidad de estar anclado, de manera natural, al suelo o subsuelo; razón por la que reúne por ejemplo, a las fincas, parcelas y establecimientos destinados a la minería.
2.- Bienes inmuebles por destino:
Se refiere a los bienes o artículos cuyo propósito es el de contribuir al mantenimiento de otro bien, es decir, son construidos por el propietario con el fin de emplearlos para preservar su propiedad; ejemplo claro de este tipo de bienes inmuebles son las herramientas.
3.-Bienes inmuebles por incorporación:
El último tipo de bien inmueble corresponde a aquellos que, atendiendo a sus características, están privados de movilidad y/o extracción, ya que se encuentran incorporados al suelo; he aquí donde se incluyen las casas, edificios o cualquier clase de ancladas en el suelo, incluso caminos en construcción.
Diferencia entre bienes inmuebles y bienes muebles
Tomando en cuenta la definición de bienes muebles como aquellos con características específicas que permiten su movilidad indistintamente de la distancia o cantidad de veces, que se trasladen desde su lugar de origen, es sencillo deducir dos diferencias claves respecto a los bienes inmuebles.
Movilidad
Los bienes muebles podrán ser trasladados de un lugar a otro sin el riesgo de deteriorarlos o renunciar a su funcionalidad, los bienes inmuebles no pueden moverse desde su lugar de origen, sea porque están anclados al suelo – como el caso de las viviendas y edificios – o debido a que dejarían de ser funcionales.
Para muestra del último escenario se considera una maquinaria diseñada para una fábrica en concreto, la cual si bien podrá ser removida del lugar, no cumplirá sus funciones en otro lugar, salvo contados casos que se cumplan lineamientos específicos, quedando inútil.
Estructura física
Los bienes muebles son tangibles porque sí, o lo que es igual, disponen de estructura física por lo que es posible verlos y palparlos, contrario a los bienes inmuebles, que también pueden ser intangibles como es el caso de los títulos de propiedad.
Garantía
El siguiente punto diferencial entre ambos tipos de bienes se encuentra en la seguridad que puede o no ofrecer, considerándose a los bienes muebles como menos seguros debido a la limitada garantía que supone su adquisición. Esta realidad se evidencia claramente en la compra de un electrodoméstico y de una vivienda, por ejemplo.
Valor:
Estableciendo diferencias entre un bien y otro, el último punto que surge se vincula a los costes, siendo por tendencia, los bienes inmuebles los que revisten inversiones más grandes de dinero para su adquisición; por otra parte, se habla bienes que carecen de valor previo definido, contrario a los bienes muebles, de ahí lo complejo de su intercambio o comercio.
Ejemplos de los bienes inmuebles
A lo largo de la nota se han expuesto algunos ejemplos claros de bienes inmuebles, pero para resumirlos dentro de un rango más corto, se amparan bajo el concepto a cualquier clase de terreno – indistintamente de su extensión o tamaño – y todo cuanto se ancle en el suelo, al igual que parcelas, fincas y títulos de propiedad.